El
cautivo
Juana Puga
Poesía
Primera Edición, 2000
64 págs.
Pero óiganla
a ella, la letra es de Juana. La música,
del mar. Oigan
entonces por ejemplo En el puente, magistral en su plasmación, o Aquí en
este zapato donde no se puede decir más con menos, o tuve miedo, esas
tres lineas exiguas en que la peripecia de la perdedora nos estremece, o
Sacrificio, o Me visto y me desvisto. ¡O lo que usted quiera, desocupado
lector!
Gonzalo Rojas
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